Playas en Madrid
Madrid es una ciudad repleta de casi todo: bares, museos, tiendas de todo tipo, parques recreativos, centros históricos, entre muchas cosas más. Lo único que le hacía falta era tener playas y, aunque no las posee en sí, existen zonas que se podrían llamar playas, en las cuales los madrileños disfrutan de un relajante espacio natural donde poder echarse un baño con la naturaleza. Lo mejor de todo, es que son lugares que no se encuentran muy lejos del centro, por lo que cualquier turista o madrileño puede dejar sus actividades para ir a relajarse un poco, o para llevar a los niños un rato y se distraigan.
A orillas del embalse de Riosequillo y a tres kilómetros de Buitrago, se extiende el área recreativa de Riosequillo, un complejo deportivo y de ocio construido por el Canal de Isabel II en 1993, un lugar capaz de acoger hasta 20.000 personas.
Desde junio hasta finales de agosto se puede disfrutar de unas magníficas piscinas con una esplendorosa vista del embalse y la sierra de Guadarrama, convirtiéndolo así en un paraíso sombreado de verde por lo árboles y arbustos, zonas de paseo e instalaciones para la práctica de baloncesto, fútbol sala, petanca y ciclismo, entre otras actividades deportivas.
Las piscinas naturales de Cercedilla están situadas en el Valle de la Fuenfría, junto al área recreativa de las Dehesas y el Puento Romano de Cercedilla. Son piscinas naturales tratadas con cloro y enclavadas en un entorno privilegiado de esta zona de la Sierra de Guadarrama de Madrid. Se encuentra equipada con aparcamientos, mesas, fuentes, baños, centro de información y rutas.
En las siguientes dos piscinas, la comunidad madrileña prohibió su uso, pero aún así son bellezas naturales que no se pueden dejar olvidadas.
Si hay un lugar en la comunidad madrileña donde se puede gozar de tranquilidad y una hermosa vista, es la Charca Verde, una zona muy famosa y conocida por sus maravillas. En el verano este lugar se convierte en uno d ellos favoritos para tomar el sol y bañarse en sus limpias y frías aguas del río Manzanares. Su afluencia es tan grande que para disfrutarlo completamente tendrías que ir entre semana.
En la subida de la Charca Verde a lo largo del río Manzanares podrás ir descubriendo charcas más pequeñas donde hacer un alto y también darte un chapuzón.
La comunidad de Madrid ha prohibido el baño en la Charca Verde (2016).
Junto a la magnífica Aranjuez nos encontramos con una hermosísima playa sobre la zona del río Tajo. La Cueca Hidrográfica del Tajo no permite el baño por ser una zona muy calurosa, estar en aguas muy turbias es considerado peligrosos para toda la comunidad. Pero, históricamente, esta playa era muy concurrida por los vecinos de Aranjuez y de sus alrededores. En los últimos años esta playa y muchas zonas del río Tajo han sufrido un deterioro bastante notable, aunque existen muchas iniciativas para recuperar esta maravilla natural.